La esposa del presidente de la República, Lilia Paredes, arribó este jueves 1 de diciembre en horas de mañana a la ciudad de Puno y se refirió a su labor como primera dama.
“Es una alegría volver a hacer la labor de primera dama. Por muchos días he dejado el trabajo porque he sentido mucha tristeza con lo que ha pasado a mi familia, por eso ahora estoy saliendo adelante”, dijo Paredes.
Tras ello, se trasladó a la localidad de Vilque para participar de la inauguración de una institución educativa inicial, así como inaugurar pistas y veredas de más de 24 cuadras en esta localidad. El pavimentado de calles demandó una inversión de S/ 3 millones. Asimismo, la construcción de institución educativa inicial 213.
Lilia Paredes agradeció a la alcaldesa de Vilque, Venancia Apaza, por la invitación a este pueblo.
La sorpresiva llegada de la primera dama se debería a que el presidente Pedro Castillo, por segunda vez, suspendió su arribo a Puno para reunirse con autoridades de Juliaca. El mandatario tiene pendiente analizar el megaproyecto de agua potable para la ciudad de Juliaca.