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Durante el interrogatorio en la Comisión de Fiscalización, Jorge Torres Saravia fue cuestionado por Isabel Cajo, una funcionaria del Congreso que ha sido objeto de críticas por no contar con un título universitario, a pesar de percibir un salario superior a S/7.000, y que actualmente se desempeña en la oficina del parlamentario Edwin Martínez.
“De verdad, que gusto de que el señor Martínez la defienda a la señorita, porque ella no tiene nada de malo. Es una mujer como muchas mujeres de las que están acá presentes y, lamentablemente, por ser bonita se le está incriminando o se le está haciendo parecer como si fuera una prostituta. Creo que merece respeto”, señaló Torres Saravia a la pregunta de Norma Yarrow.
Sin embargo, una revelación del semanario Hildebrandt en sus Trece dio a conocer que Isabel Cajo, además de no contar con estudios superiores, la joven también se desempeñaba como modelo en la plataforma OnlyFans, donde ofrecía contenido para adultos. Al respecto, el congresista Martínez justificó su contratación diciendo: “Fue evaluada por el asesor, y yo di el visto bueno. (…) Para el cargo que yo necesito, no se requiere siquiera ser bachiller“.
De hecho, antes que pasara al despacho del congresista Martínez, trabajó en la Oficina Legal y Constitucional del Parlamento durante la gestión de Jorge Torres Saravia. Es por ello que, ante la pregunta de la congresista Norma, este respondió: “No me une amistad con el señor Martínez, si él la quiso contratar en su momento a la señorita Cajo… porque se pretende decir que yo se la presenté, es totalmente falso”.
Jorge Torres Saravia revela ante el Congreso dónde se encontraba durante el asesinato de Andrea Vidal
Cabe resaltar que Jorge Torres Saravia fue destituido de su cargo como jefe de la Oficina Legal y Constitucional del Congreso el 13 de diciembre, luego de ser vinculado a una supuesta red de prostitución en el ámbito legislativo y tras el fallecimiento de Andrea Vidal.
Es por ello que, en otro momento de la sesión de la Comisión, Torres Saravia explicó que el 9 de diciembre, día del atentado contra Andrea Vidal, siguió su rutina habitual, ingresando al Congreso a las 8:00 a.m. y regresando a casa después de su jornada laboral. Sin embargo, no pudo recordar con precisión su ubicación en el momento del ataque. Afirmó que, tras su destitución, salió del Congreso a las 6:00 p.m. y se dirigió a su hogar, donde se reunió con su esposa e hijos.
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