La comunidad latina en Estados Unidos ha crecido de manera constante, convirtiéndose en uno de los grupos más numerosos del país. Este fenómeno se refleja no solo en la población, sino también en los apellidos que predominan en el territorio estadounidense. Según datos recientes, seis de los quince apellidos más comunes tienen origen hispano, lo que evidencia la influencia cultural de esta comunidad.
De acuerdo con el Statista Research Department, alrededor de 59 millones de personas hablan español en Estados Unidos, lo que subraya el impacto demográfico de los latinos. Este crecimiento ha llevado a un aumento notable en la presencia de apellidos de origen latino en la lista de los más comunes, destacando la evolución de la identidad hispana en el país.
La población latina en EE. UU. representa el 18,9% de la masa total. Foto: El Minnesota de Hoy.
El Queen Sofía Spanish Institute, una organización dedicada a promover la lengua y cultura hispana, ha informado que en el listado de los 15 apellidos más comunes en Estados Unidos, seis son de origen hispano. Este cambio es significativo, ya que en el censo de 1990 no se registraba ninguno de estos apellidos, mientras que en 2000 se incluyeron cuatro y en 2010 la cifra aumentó a seis.
¿Cuáles son los apellidos más comunes en EE. UU.?
Los apellidos más comunes en Estados Unidos son los siguientes:
- Smith
- Johnson
- Williams
- Brown
- Jones
- García
- Miller
- Davis
- Rodríguez
- Martínez
- Hernández
- López
- González
- Wilson
- Anderson
A pesar de que los apellidos anglosajones dominan los primeros lugares, los apellidos latinos como García y Rodríguez han escalado posiciones rápidamente. Se anticipa que en los próximos años otros apellidos hispanos, como Vázquez, Romero, Moreno y Herrera, también ocuparán un lugar destacado en esta lista. Pérez, quien ocupa el puesto 22 del ranking en general, es el séptimo apellido latino más común en Estados Unidos.
Legado e influencia de los apellidos latinos
La presencia de apellidos latinos en Estados Unidos no es un fenómeno reciente. Apellidos como García y Rodríguez tienen raíces que se remontan al siglo XVI, cuando los colonizadores españoles dejaron su huella en regiones que antes formaban parte de México y que hoy son parte de EE. UU. Este legado histórico ha contribuido a la diversidad cultural que caracteriza al país en la actualidad.
Debido a la significativa cantidad de migrantes provenientes de América Latina, EE. UU. se posicionó como el segundo país que más habla español después de México. Foto: QPASA.
Este legado no solo se manifiesta en los apellidos, sino también en la influencia cultural, arquitectónica, gastronómica y lingüística que los pueblos de ascendencia latina han aportado al país. Actualmente, estos apellidos representan una parte fundamental de la diversidad que define a la sociedad estadounidense, recordando las raíces compartidas y la interconexión entre distintas culturas a lo largo de la historia.
Además, reflejan el crecimiento de la población latina, que desempeña un papel crucial en la configuración de la identidad moderna de Estados Unidos.
Los estados con mayor concentración de población latina
El predominio de los apellidos latinos se correlaciona con las zonas del país donde la población hispana es más numerosa, especialmente en los estados cercanos a la frontera con México. Los estados con mayor porcentaje de población de origen hispano son:
- Texas: 29,4%
- California: 29%
- Nuevo México: 26,1%
- Florida: 21,8%
- Nevada: 21,8%
Estos datos también reflejan el estatus del español como el segundo idioma más estudiado en todas las etapas del sistema educativo estadounidense, reafirmando su importancia en la sociedad y cultura del país.
Además, el aprendizaje del español responde a la influencia de la comunidad hispana, la cual representa la minoría más grande del país y un motor clave para su crecimiento económico y cultural. Este fenómeno ha llevado a que se valore más el bilingüismo como una habilidad esencial en un mundo globalizado, fomentando una mayor interacción intercultural y una mejor comprensión de las raíces multiculturales de la sociedad estadounidense.