Joseph Dager: “La situación actual se compara con los noventa, cuando el Estado fue cooptado por mafiosos”



Dager explicó que la gente no sale a las calles por los muertos de las protestas y porque un gran porcentaje está en situación de pobreza o por estarlo, y tiene que dedicarse a trabajar para sobrevivir. Remarcó que la diferencia con los noventa es que en esa época había líderes con algún tipo de credibilidad, lo que hoy nos falta.

-Gobierno y Congreso son muy impopulares, pero las movilizaciones civiles no son muy fuertes. ¿Cómo llegamos a eso?

No se ve gran movimiento social especialmente en Lima. Sin embargo, en el primer año de Boluarte, hubo más de 1.000 movimientos sociales, sobre todo en provincias: es un récord. La gente sí está expresando su descontento en regiones, de modo focalizado y sin liderazgo que las aglutine. Además, los 50 muertos de las protestas no son poca cosa: para salir a marchar ahora se piensa dos veces. Esas marchas representan cosas pocas veces vistas en la historia del Perú: por momentos hubo 20 regiones protestando. No fructificaron en Lima y líderes limeños vieron posibles infiltrados, algunos acusándolos de “terrucos”. No empatizaron con esa protesta porque lo que pretendía era diferente a lo que se quería más en Lima.

-¿Las grandes taras de nuestra historia –desintegración, discriminación, corrupción– nos explotaron en la cara en el Bicentenario?

Efectivamente. Es chocante, porque más o menos entre el 2001 y el 2016 teníamos una república que más o menos funcionaba: los presidentes terminaban su mandato, más o menos había división de poderes, había crecimiento económico, el Estado había comenzado a tomar en serio su posición de regulador y líder de políticas sociales. Y de repente comienzan a salir denuncias de Lava Jato, y en lo político comienza a desmantelarse todo desde el 2016 con PPK y un Congreso de 73 fujimoristas que no quisieron facilitar la gobernanza y la posibilidad de continuar en esa saga de estabilidad política y crecimiento económico.

PUEDES VER: Dina Boluarte: solo el 5% de peruanos aprueba su gestión, cifra más baja desde 1980

-¿El desmantelamiento y retroceso en el Estado, qué peso tienen para la ciudadanía?

Hay un peso, hay una conciencia. Es responsabilidad de los líderes políticos, líderes de opinión y medios de comunicación contribuir a esa toma de conciencia de la ciudadanía. De decirles que, por ejemplo, una entidad como la Sunedu debe hacer contribuir a que las buenas y caras universidades no estén tan alejadas en calidad de las universidades que son un poco más económicas. Es decir, las entidades estatales tienen que equiparar la cancha, asegurar que esas universidades que no son tan caras tengan condiciones de calidad como las que son más caras, de manera que dentro de un tiempo razonable, 5, 10, 15 años, no haya tanta diferencia como ahora en lo que pesan esos diplomas. Y lo que han hecho en el fondo es maniatarlos, quitarles atribuciones, hacerlos menos eficientes. Y se utilizan argumentos falsos porque dicen la OCDE lo ha pedido. Mentira, al contrario, pide que los reguladores sean más eficientes. Estamos en una situación más parecida a los 90 en el sentido de que están cooptando el Estado para favorecer intereses de privados y perjudicar a las mayorías sociales.

-¿La juventud está dormida?

Creo que la juventud está empezando a despertar. Estamos en un momento complicado. Según las cifras del INEI, la pobreza y la pobreza extrema han aumentado. Pero ese 29% a mí me preocupa tanto como el 31% que el propio INEI califica de población vulnerable que en cualquier momento podría pasar a la pobreza. Esto quiere decir que hay un 31% de nuestra población que lamentablemente no puede, en este momento, perder dos o tres horas en marchas, que tiene que estar permanentemente en el día a día trabajando, y buena parte de nuestra juventud estudia y trabaja. Entonces estamos en un momento complicado, en que, junto con las muertes, no favorece a que esta juventud termine de despertar. Sin embargo, yo tengo esperanzas que eso sucederá.

-¿Hay algún momento de nuestra historia que nos ayuda a entender la crisis actual?

Yo lo compararía mucho con los noventa: un Estado cooptado por mafiosos, que termina beneficiando intereses personales, con vocación autoritaria, que pretende controlar los medios de comunicación… Un Estado como este que ha completamente controlado el canal y los medios estatales, el IRTP, en eso se parece absolutamente a los noventa, en un período en donde la población tampoco reaccionaba demasiado. Nos diferencia quizá que en los noventa teníamos todavía algunos liderazgos de la oposición que mantenían digamos algún tipo de credibilidad. Quizá nos falta eso. Nos falta un nuevo discurso, nuevos liderazgos, lo que algunos llamaban outsiders, pero en el buen sentido del término, es decir, gente que tenga presente que la política debe ser entendida como el bien común, como una posibilidad de dialogar, de llevar a buen puerto políticas públicas que beneficien al país. Creo que ya no debemos pensar en outsiders completamente fuera del espectro de la cosa pública. 

PUEDES VER: Coordinador de Portalatino recibe sueldo del Congreso para buscar nuevos militantes de Perú Libre

-Boluarte es la primera presidenta mujer. ¿Cómo pasará a la historia esa experiencia?

Creo que de un modo muy penoso, una lástima. Si el símbolo del presidente de origen rural y campesino era muy potente, terminada esa presidencia por las razones que fuera, que lo sucediese una mujer también de origen provinciano quechuahablante era otro símbolo que lamentablemente no hemos podido aprovechar. Que nuestra primera presidenta mujer sea en el contexto del Bicentenario desde el punto de vista histórico, sociológico, simbólico, hubiese sido una gran cosa para el país. Lamentablemente, va a pasar a la historia como una presidencia que será recordada por los asesinatos, con una presidencia que en tanto débil termina no solo asociándose al Congreso sino siendo manejada por él con el propósito de durar hasta cuando pueda, y que termina gobernando con quienes perdieron las elecciones.

-¿Cómo ve la gestión en el Ministerio de Cultura?

Probablemente Cultura sea la más penosa y triste demostración de la ineficiencia del Gobierno y, por otro lado, de los aliados que tiene la presidenta Boluarte. Todo parece indicar que el sector cultura está muy aliado a fuerzas radicales de derecha. Acaban de nombrar como viceministra a una militante del fujimorismo. Recordemos que la ministra y los viceministros en su momento se reunieron con movimientos como La Resistencia, que demuestran, muy poca vocación democrática y, permanentemente en Cultura se hace alusión a que los premios que se van a dar ahora deben tratar sobre tal cosa y no sobre tal otra. Hay un intento de, no voy a decir censurar, pero sí guiar la cultura hacia determinados asuntos ideológicos.



Source link

What do you think?

Written by admin

Comments

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Loading…

0

Chofer de Dina Boluarte durante campaña electoral fue contratado con ordenes de servicios en tres ministerios

Perú-México: relaciones serían menos hostiles, pero seguirían las diferencias | Claudia Sheinbaum | Dina Boluarte | AMLO | Mundo