El estado de Nueva York prohibió la venta de armas semiautomáticas a menores de 21 años en un intento de reducir la violencia tras las recientes matanzas perpetradas por adolescentes en Buffalo y Uvalde, que se saldaron con 10 y 21 muertos (19 niños) en las últimas semanas.
Hasta ahora, la edad mínima para adquirirlas era de 18 años.
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La gobernadora del estado, la demócrata Kathy Hochul, firmó el lunes 6 un paquete de medidas aprobadas en tiempo récord por el Parlamento del estado, que también incluye la prohibición de vender chalecos tácticos y cascos protectores a personas ajenas a ciertas profesiones.
“La violencia de las armas de fuego es una epidemia que está desgarrando nuestro país”, dijo la gobernadora, acompañada de los líderes de la Cámara —que hicieron posible la aprobación del paquete— y de autoridades locales, como la fiscal Letitia James.
Hochul instó al Congreso federal a que “lidere y tome medidas inmediatas” de prevención significativas al considerar que se trata de un “problema nacional”. “De ello dependen vidas”, urgió.
Solo el último fin de semana se contabilizaron 10 muertos y más de una veintena de heridos en una serie de tiroteos en todo el país.
Según una encuesta de CBS News, la mayoría de los estadounidenses se dicen a favor de normas más estrictas sobre la posesión de armas y el 81% apoya la verificación de antecedentes de todos los compradores potenciales.
Ante esta ola de violencia, el presidente Joe Biden, también demócrata, volvió a fustigar a los republicanos que se oponen a restringir la venta de armas y deploró que lugares como escuelas u hospitales “se hayan convertido en campos de exterminio, campos de batalla”.
El último domingo 5, el mandatario volvió a decir “basta”. “Si no podemos prohibir las armas de asalto como deberíamos, debemos al menos aumentar a 21 la edad” para adquirirlas, tuiteó.
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La violencia con armas de fuego en Estados Unidos mató a más de 18.000 personas en lo que va del 2022, incluidos casi 10.300 suicidios, según Gun Violence Archive.
Los incidentes más graves hasta el momento son la matanza perpetrada por un supremacista blanco de 18 años en un supermercado de Buffalo, en el norte del estado de Nueva York, el 14 de mayo, en el que murieron 10 afroestadounidenses; y el tiroteo 10 días después en una escuela de Uvalde, en el sureño estado de Texas, a manos de un joven de 18 años, en el que murieron 19 niños y dos maestras.
En 2020 había en circulación en Estados Unidos unas 393 millones de armas de fuego, más que la población del país.