Miguel es uno de los muchos venezolanos que ha dejado su país para buscar una mejor calidad de vida en el extranjero. El joven ha recorrido ya tres países y, aunque las oportunidades nunca le faltaron, quedarse en alguno de ellos nunca fue una opción. Su sueño es llegar a Estados Unidos para generar más ingresos y ayudar a su familia. Una odisea en la que no está solo, pues lo acompaña Beckis, la perrita que adoptó cuando aún era muy cachorra.
Desde que su camino y el de Beckis convergieron en una calle de Viña del Mar, hace tres años, se han vuelto inseparables. En un diálogo con El Diario, reveló que el animal está más que acostumbrado a este tipo de recorridos largos, pues siempre que se trasladaba de ciudad a ciudad, la perrita se acostaba sobre su mochila y espalda.
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“Para mí, ella es un miembro más de mi familia. Le compré los zapatos cuando estaba muy chiquita para evitar que se quemaran sus patas cuando el piso estaba muy caliente. También tiene su gorra y un suéter para protegerla del frío”, explicó.
Tras una prolongada estadía en Chile, la dupla retomó hace cuatro meses su viaje, que inició cuando Miguel decidió crear una cuenta de TikTok para documentar su recorrido y el de Beckis por Latinoamérica. Su video más visto tiene 300.000 visualizaciones.
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“Hace cuatro meses, inicié esta aventura con mi mascota. Empecé a viajar de una ciudad a otra para trabajar y ahorrar lo suficiente para lograr mi sueño, que es llegar a EE. UU. Yo suelo limpiar los parabrisas de los carros en los semáforos o vendo chocolates. Es mi rutina diaria para pagar el hostal y las necesidades de mi perrita”, comentó el venezolano oriundo de Villa de Cura, estado Aragua.
Actualmente, Miguel está encaminado a Colombia, donde planea cruzar la selva del Darién para llegar a Panamá. El lugar tiene una orografía peligrosa, con crecidas súbitas de ríos, enormes pendientes y precipicios extremadamente difíciles de sortear que, además, alberga a diversos grupos criminales.
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A pesar de los peligros, Miguel confía en que el destino le sonreirá. Además, ha dejado en claro en más de una ocasión que su prioridad número uno es Beckis: “Le compré una chaqueta impermeable. Voy a comprarle otras cositas para llevarla bien abrigada. Antes que mi comodidad, siempre estará ella”, reiteró.
Muchos de sus seguidores en redes sociales le han dicho que va a ser difícil que le permitan el ingreso a Estados Unidos si está acompañado de la perrita, pero el joven prefiere dejar su sueño de lado antes que abandonar a su compañera.
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“Yo estoy decidido a cruzar y no pienso separarme de mi mascota porque ella es mi ser querido. Muchas personas me han estado escribiendo para asesorarme sobre los documentos que necesito para cruzar con ella”, agregó.
Miguel agradece el apoyo que le han brindado a través de las redes sociales y comenta que se siente mucho más acompañado porque existen personas que lo animan a seguir adelante.